Para los que seguimos medianamente la actualidad en los últimos años de la sociedad y política en España nos hemos dado cuenta de que muchas de las cosas indignantes que han ocurrido parecen sacadas de Los Simpsons. La peculiar ciudad de Springfield se caracteriza entre otras cosas por carecer de sentido en materias de gobierno o de su propia sociedad, y parece que lo mismo está pasando en España últimamente. Aquí recojo un resumen con algunos de los paralelismos entre algunos casos ocurridos en nuestro país y que se parecen de alguna manera a lo que pasa en Springfield.
Políticos corruptos
El pan de cada día en España últimamente. Banqueros que quiebran bancos y se van de rositas cobrando pensiones millonarias, alcaldes que se llevan un pico por dar permisos de obra, coger un poco de aquí y un poco de allá, pelotazos urbanísticos... El alcalde de Springfield Joe Quimby simboliza todo eso, y en España tenemos unos cuantos así (aunque también en otros sitios, si le sumamos lo de mujeriego tenemos a Berlusconi).
Ocultar la subida de impuestos
En un capítulo de Los Simpsons, se ve cómo en el futuro Lisa es la presidenta del gobierno. El país está sumido en una profunda crisis y con una mala herencia del anterior gobierno, y no les queda más remedio que subir los impuestos. Pero para suavizar el golpe a los ciudadanos, deciden maquillar el término para que quede más bonito. Un vídeo ya famoso circula por ahí con la comparación entre lo que decía Lisa y lo que decía el gobierno del PP cuando llegaron al poder hace unos meses:
Casino
Springfield necesita ingresar dinero y para ello se les ocurre abrir un casino de la mano del Sr. Burns, el magnate que puede invertir en ello. En los últimos meses, la Comunidad de Madrid está negociando con un magnate estadounidense para abrir un casino, conocido como Eurovegas, a cambio de saltarse algunas leyes (como en el estado de Nevada), y prometiendo puestos de trabajo e inversión.
Monorraíl - AVE
En un capítulo de Los Simpsons, detienen al Sr. Burns por verter residuos radiactivos en un parque municipal, y como multa le hacen pagar 3 millones al ayuntamiento. El alcalde Quimby decide convocar un pleno con los ciudadanos de Springfield para decidir en qué invertir esos 2 millones (ups, que despiste, se perdió uno por el camino). Finalmente un personaje de otra ciudad les convence para construir un monorraíl. "¿Y no armará mucho alboroto? Verá señora, yo ni lo noto", aseguraba. Lisa le pregunta qué sentido tiene un monorraíl en una ciudad con la población tan centralizada, a lo que le contesta "podría contestarte a esa pregunta, pero entre tu y yo, ni tu profesora lo entendería". En España se ha invertido mucho en el AVE en esta última década, lo que no está mal en principio, salvo que se ha comido algunas líneas de otros trenes que antes sí que llevaban cientos de pasajeros, y ahora el AVE pasa por algunos pueblos prácticamente vacío...
Olimpiadas
Springfield se empeña en organizar unas Olimpiadas, y para ello se pone las pilas en limpiar y acomodar la ciudad, y sacarle los cuartos a todo extranjero para sacar dinero a costa de organizar los Juegos. Finalmente por una broma de Bart, no se llegan a celebrar (eso sí, la mascota Muellín diseñada por Homer es todo un éxito). En España llevamos años apoyando la candidatura de Madrid, primero para 2012, luego para 2016 y ahora para 2020. Veremos cómo acaba todo.
Fallecidos en el censo para votar en las elecciones
En el capítulo en el que el recién salido de la cárcel Actor Secundario Bob se presenta a las elecciones, gana por inmensa mayoría, nada menos que 100% frente a 1% (con un margen de error del 1%). Lisa se pone a investigar porque le parece muy sospechoso, y descubre que en la lista de votantes (¿pero la lista no era secreta?) hay numerosas personas fallecidas, incluso mascotas del cementerio de Springfield. En algunos pueblos españoles ha habido casos en los que sospechosamente se incrementaba el censo de población de cara a las elecciones.
Maltrato animal en fiestas populares
"Hoy es el dí... hoy es el dí... a del apaleamieeentoooo...". Ese era el himno oficial de las fiestas del día del apaleamiento de Springfield, en el que cada ciudadano cogía un garrote y se ponía a perseguir a las culebras de la ciudad con el fin de acabar con ellas a palos. En España, que somos muy tradicionales, tenemos unas fiestas parecidas. Los toros son bien conocidos mundialmente, la mayoría de las corridas acaban con la vida del toro, algunos encierros por las calles incluyen el lanzar dardos al toro, lanzarlo al agua o encenderle los pitones. También hay una fiesta ya famosa en un pueblo en el que lanzan una cabra desde lo alto de un campanario, así como otros tipos de animales como gallinas o patos en otros pueblos
Vertidos ilegales de basura
Y gracias a una noticia que he visto hoy en las noticias, he escrito este post, porque ya ha sido el colmo de las comparaciones entre España y Springfield. ¿Recordáis el capítulo en el que Homer le hace el favor al alcalde para convencer a otras ciudades de verter sus residuos y basuras en Springfield? Camiones llegaban día y noche a una vieja mina abandonada a vertir de todo, hasta que la tierra no daba más de sí y salía toda la basura a la superficie, hasta que tuvieron que mover la ciudad a otra parte, literalmente. Pues entre Abanilla y Orihuela (Murcia y Alicante) está pasando algo parecido desde hace unos años, pues un político de esos que tenemos por aquí movió los hilos para que vertieran de todo en una finca, asegurando que eso es bueno para el campo, pues es abono natural. Claro, las jeringuillas, plásticos y líquidos tóxicos son buenos para los naranjos, oiga. Y el olorcito da gustito también.
Y seguramente habrá más similitudes entre España y Springfield, que aquí somos muy salaos, pero por hoy lo dejo. Sólo hace falta ver Los Simpson a las 14:00 en Antena3 y después ver las noticias, seguro que uno saca cosas en común.