Subida a la Aitana

Hace un tiempo publiqué una entrada sobre las montañas de la provincia de Alicante, y el sábado pasado por fin tuve la ocasión de subir la Sierra de Aitana. Esta sierra tiene el punto más alto de la provincia, situado a 1.558m sobre el nivel del mar. Sin embargo, el punto más alto está restringido por la famosa base militar ubicada en lo alto de la montaña. Esta base se construyó a finales de los años 50 en colaboración con los Estados Unidos para vigilar el espacio aéreo y rutas que van a Oriente Medio y el Mediterráneo. Así pues, muchas han sido las quejas en la última mitad de siglo sobre la conveniencia o no de esta base y peticiones de desmantelamiento. Aunque una base que hay más abajo ya ha sido desmantelada, la zona de los radares de la cumbre sigue en activo.

Aun así, para el visitante amante del campo y la montaña no todo está perdido, pues se sigue pudiendo ascender (casi) a lo alto del todo. Existe un punto con un montoncito de piedras y una señal que indican 1.547m y es donde se suele llegar cuando se quiere ascender a la Aitana. El paraje es muy bonito, y se divisa gran parte del sistema montañoso de esta zona de la provincia de Alicante. Caben destacar el Puig Campana, el Cabeçó, el castillo de Guadalest, el embalse de Amadorio... y la isla de Ibiza. Sí, exacto, Ibiza. A lo lejos se divisa esta isla balear, que es la más cercana a la península, a la altura de Denia. Aunque hubo nubes el día que subimos, estaba claro hacia el horizonte por el mar, y a lo lejos se divisaba una línea montañosa que sin duda era la isla de Ibiza (ver imágenes en otro blog).

El cartelito con la altura es obra de Bittorin. En su blog explica su subida.

El tiempo acompañó bastante, aun así nos confiamos y pasamos frío, sobre todo en la cumbre, donde hacía bastante viento. Además, en una ladera en la parte de arriba al lado de la base aún quedaban restos de nieve, pese a estar ya en abril. Se hizo larga la subida, pues dimos bastante rodeo con el fin de disfrutar de varias rutas y ver unas fuentes naturales que hay por allí. En total caminamos 8 horas, desde que empezamos a subir hasta que volvimos al coche. Pero valió la pena. Después de esta subida y la que hice hace unos años al Cabeçó, espero poder subir alguna montaña más de la provincia alguna vez.

Aquí os dejo un vídeo panorámico desde la cumbre, desde donde se ve toda la costa y demás montañas de alrededor (el sonido del viento es bastante molesto, bajad el volumen):